Restaurante Mr. Maki

He de decir que volveré. La comida está buena es como un fast food asiático pero mejor que el equivalente mcdonald. El ramen no está mal pero no es mejor que he probado pero calidad precio es un 3,5. Los camareros muy amables pero el rollo de que te van llamando con el timbre no me acaba y el local es pequeñito. Está guay pero no es mejor sitio, el rollito y los triángulos no me han acabado, algo aceitosos, pero está en precio y es todo un éxito que así sea. La comida no es excelente pero no está buena. Si subiera de precio no volvería pero tiene mil platos y es para Repetir.

Nos acercamos al sitio con reticencia, pero salimos gratamente sorprendidos. No había escuchado hablar del sitio (así como sí había escuchado sobre otros de la zona) y no sabíamos cómo iba a ser. Pues bien, ha sido genial. Mogollón de platos donde elegir, dos tipos de menús (elegimos el AKIRA de 12'5€ con entrante, ramen y bebida) y el ramen (en concreto el tonkotsu) estaba RIQUÍSIMO. Además estuvo preparado en tiempo récord. Me he quedado sorprendidísimo cuando nos han avisado de que ya estaba. Sin duda relación calidad precio es perfecto.

Buenísimo como siempre. Pedimos dos menús akira y a parte un entrante extra que eran las takoyakis. Es autoservicio, es decir, tú pides y te dan un aparato que suena cuando tu pedido está listo para recoger. Nos ha costado 30€ todo. El primer menú era con ternera con arroz y una ensalada, y el segundo unos rollitos vietnamitas y sushi.

El caldo del Tonkotsu ramen está tan espectacularmente bueno que es imposible no cerrar los ojos al darle una cucharada. Es delicadamente denso, muy suave y untuoso, pero sin ser en absoluto graso. La cantidad que te sirven en el cuenco es enorme, a duras penas he podido terminármelo las veces que he ido, la carne está buenísima, lleva dos buenas porciones de naruto, el huevo está increíble y el contraste de todo lo demás con las hojas de pak choi es gozoso. En serio. El precio del menú Akira, que consta de un entrante, más el principal que elijas (en mi caso siempre es ramen) e incluye la bebida, da gloria verlo. Hacía bastante tiempo que no volvía y la decoración ha cambiado un poco - las lámparas nuevas me han encantado - y la atención sigue siendo inmejorable, son tan amables y agradables que, con todo, comer allí es felicidad con todas las letras.