Restaurante Slavia

Concepto de restaurante muy único y que se sale totalmente de lo habitual. Todos y cada uno de los platos que probamos (la idea aquí es probar mucho y compartir) estaban la verdad muy ricos, con sabores intensos e ingredientes de calidad. La pega por esa parte es que las cantidades son bastante justas (menos la tarta de queso de postre, muy grande y con un sabor a queso de cabra fuerte). Por otro lado, si es cierto que quizás se echan en falta algunos platos más en la carta para poder tener más elección. Destacar el excepcional trato por parte del personal, el chico que nos atendió fue muy amable y estuvo 100% pendiente de nosotros. Lugar que tienes que visitar por lo menos una vez.

Comida sana muy bien elaborada con un concepto nuevo de cocina con productos de proximidad en su mayoría vegetales . El tartar de tomate acompañado de hoja de Capuchina es realmente una explosión de sabores , aunque el precio me parece excesivo tratándose de tomates y verduras . La bandada de bacalao muy bien , melosa y sabrosa . Los tacos de col es el plato más flojo , la ensaladilla de relleno no tenia sabor. El pescado y las mollejas muy buenas , cocinadas en su punto acompañadas de salsa delicadas . Lo mejor sin duda los postres , la Tatin y sobretodo la tart de queso de cabra es sobresaliente . Lugar muy agradable bien decorado, servicio amable , rápido y atento . Lo recomiendo

Restaurante vegetariano a excepción de un par de platos. Me gusto mucho la brandada de bacalao, surtido de quesos, girgolas de castanyer y los corazones de alcachofas. Pagamos 50€/persona, lo que me pareció algo caro para lo que habíamos pedido. Un punto a mejorar es el servicio, teníamos que estar reclamando la atención todo el rato si queríamos pedir algo.

Todos los platos que hemos probado riquísimos con mención especial al pastel de queso! La calidad de la comida es muy buena pero las raciones son un poco justas para el precio. El servicio es muy atento pero el tiempo de espera entre algunos platos ha sido bastante largo, aunque sin duda repetiríamos!

Novedoso por el concepto del restaurante, 80% vegetariano y con la trazabilidad del producto apostando por el km0. Es un acierto el menú degustación a ese precio para hacer un recorrido por toda la carta. El precio de los vinos eran un poco elevados. El ambiente muy agradable, y el trato de los camareros fue perfecto. Para repetir y recomendar.